EMOCIÓN
La emoción es un recurso adaptativo de todos los mamíferos, para percibir mejor el entorno y actuar en consecuencia.
Tenemos zonas del cerebro especializadas. El hipotálamo recibe cada pensamiento y lo liga con cada emoción sentida y esta unión detona una respuesta química en forma de hormonas que permanentemente invaden todo el sistema endocrino. Se modula así el comportamiento de todas las estructuras corporales, órganos, cadenas musculares, células, tejido conectivo… Influyendo en nuestras acciones y decisiones de cada instante.
Una emoción es una información valiosa que fluirá por nuestro inconsciente y como tal debemos tratarla. Como si se tratara de una comida, el cuerpo la disfrutará, la masticará, la asimilará y después, tendremos que excretarla. Por más tarde recibir nuevo material con el cuerpo lo más limpio posible. A esto podemos decir una emoción positiva: cojo la información, la expreso y la suelto.
EMOCIÓN ATRAPADA
Todas las experiencias, vivencias y pensamientos, quedan en unos archivos inconscientes almacenados en la médula espinal, son momentos de historia por donde las emociones pasean, buscando recursos para el mejor viaje y que tienen la nuca como final de trayecto. Estos archivos pueden estar a un nivel muy inconsciente, no hace falta que estén en nuestro recuerdo, incluso pueden ser archivos heredados de nuestro árbol genealógico.
En una emoción que cuesta digerir y excretar, puede que el cuerpo pida simplemente una atención especial y nos ofrece un síntoma para llamar la atención: así le hacemos caso, lo expresamos y la drenemos.En un segundo grado quedará una emoción a la que no le demos la atención que nos reclama el síntoma. Quizás nos da pereza, quizá la utilicemos para manipular situaciones, …En tercer grado tendríamos una emoción de tipo “alérgico”, recurrente, adictiva. El cuerpo puede tener una reacción defensiva y el cerebro puede quedar en un bucle de retroalimentación, con el hipotálamo haciendo bucle con las mismas hormonas y afectando especialmente a estructuras corporales concretas, sensibles al tipo de emoción. En los 3 casos necesitamos un proceso de concienciación, reconocimiento, agradecimiento y deseo-decisión de soltarla.
ORDENADOR BIOLÓGICO
Podríamos definir el cerebro como un ordenador biológico, en el que las estructuras cerebrales serían la torre, fascinante laberinto de conexiones electromagnéticas. La mente serían los programas instalados, susceptibles de ser accedidos y mejorados en todo momento. Y la conciencia sería el teclado del ordenador con el que podemos decidir si funcionamos con los programas previamente establecidos o conviene una reprogramación más óptima.
Siempre será una decisión personal e intransferible. Esto no significa que no podamos pedir la asistencia de un técnico, que con su caja de herramientas nos puede facilitar algún trámite.
Pero la conciencia será sólo nuestra, el amor puesto en el trámite, con técnico o no, realizará la actuación propia. Al igual que una canción compuesta por un buen músico, si la amamos, la haremos nuestra cuando la interpretemos.
CÓMO RECONOCER LA EMOCIÓN ATRAPADA
Si tenemos una emoción atrapada tendremos un síntoma de malestar, no estaremos en paz. Se puede dar que la vemos clara, la reconocemos, pues entonces nos sentamos en el teclado y le damos en positivo el orden contrario.
Por ejemplo “soy perfectamente capaz” de aprovechar esta emoción de tristeza, rabia, … y de transformarla en alegría, paz…. Indispensable darle expresión, es necesario reír, llorar, suspirar, cantar, gritar…
Así al color emocional de inicio le pondremos un color complementario que equilibrará las intensidades, pensamientos y hormonas.
Dependiendo de la personalidad de cada uno, podemos tomarnos el asunto con una profundidad, hacer un ritual, meditarlo o filosofarlo o bien simplemente decir la frase bien estructurada y punto, lo importante es positivizar la frase:
“soy perfectamente capaz…”, “necesito recuperar la normalidad…”, “ahora te veo, gracias y te permito fluir…”.
Si no acabamos de limpiar, podemos inventar el método que más nos guste. Se trata de liberar la emoción atrapada, borrar el caminito habitual que aprendimos a lo largo de la vida como respuesta-defensa adaptativa y decirle a nuestro subconsciente que ya estamos cansado de resolverlo de esta forma y que ahora tenemos una solución más creativa o divertida.
Esta señal de que ante un impacto emocional el cerebro ha aprendido a resolver de una forma concreta que se convierte en automático. Cogida del archivo medular, impactando en la amígdala cerebral y haciendo una respuesta sin córtex, sin ser meditada.
VIAJE AL NIÑ@ INTERIOR
Es en la infancia cuando tomamos la mayoría de patrones de conducta, adaptación y defensa.
Visualizo al niño que fui y soy, con la emoción atrapada que quiero modificar. Le saludo y me presento. Le agradezco todo lo que está haciendo por mí, le doy valor, “Gracias por enviarme este recuerdo, así me hago consciente, es muy importante para mí. Pero ahora soy mayor y decido otras opciones, tengo una nueva manera de resolver las situaciones más divertida, ya no hace falta que me envíes más ese recuerdo, tú quedate jugando y yo de vez en cuando te vendré a ver, nunca más estarás solo”. Lo abrazas y ves cómo se queda en un lugar lleno de sol, feliz, donde nadie le estorba.
LA PELÍCULA RALENTIZADA
En el universo todo está polarizado yin-yang, femenino-masculino, oscuridad-luz, …..
El masculino manifiesta, se muestra, brilla (estrella). Pero es del principio femenino, a menudo oculto, de donde se engendra toda manifestación (materia oscura del universo)
Al igual que en una película de cine, donde una cantidad determinada de fotogramas por minuto son intercalados en una oscuridad absoluta que les da sentido. Si bajamos la velocidad de la película, seremos capaces de entender mejor el proceso fotográfico, detener la ilusión de continuidad, fijarnos en un fotograma concreto y ver entre ellos la oscuridad que les hace posible.
Puedo hacer comportarse en el cerebro de la misma manera con una emoción, si lo ralentizo o lo paro en el fotograma-instante antes de que dispare la amígdala y puedo añadir el espacio oscuro para añadir la frase positiva sublimen al, el deseo de cambio, la mejor opción para tí….
EL CÓDIGO DE LA EMOCIÓN
Éste es el título de un libro escrito por B. Nelson, donde mediante un test kinesiológico, se localiza una emoción atrapada, relacionada con un síntoma concreto que nos está afectando: buscamos una edad donde quedó en memoria y un lugar en el cuerpo donde quedó baja la energía.
En un nivel más profundo, se puede presentar un muro del corazón, impacto más severo, más instalado en el inconsciente y que puede contener diversas emociones relacionadas
De esta forma ponemos al consciente lo que estaba en el inconsciente. Respiramos la emoción y quedamos listos para modificar la conducta.
EMOCIONES Y ÓRGANOS RELACIONADOS
Desde la medicina china nos han llegado los estudios más pulidos al respecto, informaciones que en otras culturas la historia casi ha borrado. Afinando los ojos y con un cuenco de arroz, haremos cinco céntimos de forma sencilla.
La energía en cinco fases: fuego, tierra, metal, agua y madera. El fuego genera la tierra con la ceniza, la tierra con el fuego fabrica el metal, el agua enfría el metal y genera la madera, la madera crece hasta la esencia del fuego.
Estas 5 fases o elementos se vinculan a unos órganos concretos, cadenas musculares y emociones que les afectan especialmente.
- FUEGO: CORAZÓN, INTESTION DELGADO, TRIPLE CALENTADOR-TC-, PERICARDI
Al fuego le suele afectar la comparación con los demás: cómo me veo, cómo siento que me ven, me siento juzgado. Asimilación y aceptación de uno mismo, autoestima, sintonía y coherencia entre la esencia de tu corazón y la manifestación vía pericardio.
Algunos músculos relacionados son: subescapular (corazón), cuádriceps (tripa delgada), redondo mayor (TC), glúteo medio (pericardio) .
Emociones o actitudes relacionadas: consternación, pretensión, abandono, pena, creerse más que…, creerse menos que…, inseguridad, etc.
Expresión tonificadora: risa. - TIERRA: BAZO, ESTÓMAGO
Hacer presente. Confianza en uno mismo y en los demás, me ocupo pero no me preocupo, alimentarse desde la esencia y no desde el personaje, coherencia entre imagen propia y social.
Algunos músculos relacionados son: dorsal ancho (bazo), pectoral mayor clavicular (estómago)
Emociones o actitudes relacionadas: preocupación, obsesión, pena, ansiedad, autoestima…
Expresión tonificadora: cantar (cojo aire y lo utilizo ahora). - METAL: PULMÓN, BUDELL GORDO
Es la salida del proceso metabólico, estar listo para soltar todo lo que ya ha estado integrado. La proyección de futuro se hace haciendo presente y soltando, sin sentirse atrapado o sin salida. Sin poner resistencias a los cambios. Abandonando los patrones envejecidos.
Algunos músculos: aserrado anterior (pulmón), tensor de la fascia lata (tripa gruesa).
Emociones-actitudes relacionadas: tristeza, aflicción, apego, desánimo, confusión, pena profunda,…
Expresión tonificadora: suspirar. - AGUA: RIÑÓN, BUFETA
Voluntad de vivir, fuerza genética de la vida, valor y fuerza. Sin embargo, el agua tiene tendencia a ir abajo y quedarse quieta, necesita tsunamis para que la energía fluya y dé vida. El agua también marca el territorio invadido.
Algunos músculos relacionados: psoes (riñón), peronés (bufeta).
Emociones-actitudes relacionadas: miedo, miedos heredados, paranoia, pánico, culpa, inseguridad creativa, …
Expresión tonificadora: llorar - ÚTERO: génesis primaria y centro gravitacional de la organización social y del cuerpo. Le afectan los abusos de poder y las vejaciones
- MADERA: HÍGADO, VESÍCULA BILIAR
La madera quiere tomar decisiones desde la esencia, desde lo que mueve al niño interior, estirar las ramas a voluntad, con valor, valentía y coraje sin imposiciones… como lo hacen los niños, sin separar el cuerpo del emoción y de la mente.
Músculos relacionados: pectoral mayor espectral (hígado), deltoides (bufeta fel)
Emociones relacionadas: rabia, resentimiento, frustración, odio, culpa, etc.
Expresión tonificadora: gritar.
A menudo podemos encontrarnos superados por una vida cotidiana que puede convertirse en estresante. Un poquito de estrés espabila, nos permite retroalimentar voluntades positivas, coger fuerza. Pero si lo sentimos por encima de nuestras capacidades de respuesta corremos el riesgo de magnificarlo, de hacerlo mayor de lo que es en realidad (divina imaginación).
Si está en peligro la integridad o la vida, perfecto, las suprarrenales producirán adrenalina a raudales para defenderte o huir y que se disparen las amígdalas que hagan falta. A menudo, pero no hay por tanto. No es un peligro tan grave, no nos va la vida y le estamos diciendo al cerebro que sí, que es terrible lo que nos sucede. Podemos entonces quedarnos en un plano mental, disociado del cuerpo, y hacer un bucle negativo de pensamientos que se convierten en cadena. Más tarde será el cuerpo el que se quejará, pidiendo atención y unidad. Respiramos la situación, ralentímosla.
Me gusta un dicho chino que dice “piensa mientras el corazón te ría”, cuando el corazón ya no ríe, estás en bucle, no pienses más. Si tengo que decidir trato de sentir dónde me siento más íntegro, y si no es suficiente, que lo decida una moneda elevada a la sabiduría del cosmos.
Del manantial mana para cualquiera que quiera, entonces para qué tanto acaparar?
Lo que llevas dentro esperando tanto tiempo que tan sólo ya tu corazón lo puede recordar
Para ser un ser humano, a pesar del peso de la historia y de la crueldad, tan sólo hay que amar
Kiko veneno
La disciplina no es una finalidad en sí misma, sólo un medio voluntario de tránsito hacia una finalidad
Robert Fripp