Que levante la mano quien no pulse los dientes, ya sea todo el día o sólo de noche…Los odontólogos constatan en sus consultas que sólo una pequeña parte de la población levantará la mano.
Por todos es conocido que la sociedad actual nos empuja a llevar un ritmo de vida acelerado. Algunos afirman que el estrés y/o ansiedad que esto genera es la plaga de nuestra época actual. Cierto es que el hecho de estar sometido a estrés de forma prolongada altera nuestros mecanismos fisiológicos a muchos niveles y puede generar o facilitar la aparición de diferentes procesos patológicos. Uno muy común es el Dolor Oro Facial, producido principalmente por la Disfunción Temporo Mandibular.
El Dolor Oro Facial comprende todos los dolores de esta región y también dolores irradiados, es decir, que tienen origen en esta región y que llegan más allá: en el resto del cráneo, en el cuello, en la nuca o incluso ninguna en la línea de los hombros. Este fenómeno se debe a la complejidad anatómica y fisiológica que nos encontramos en esta zona, donde las diferentes estructuras se interrelacionan e interactúan de forma notable.
Todas estas disfunciones pueden tener distintos orígenes. Los más importantes, como ya anticipamos, los encontramos en el campo psicosomático y emocional, en forma de estrés y de ansiedad, pero también pueden ser traumatismos de distinto tipo, ya en edades tempranas, incluso en el momento del parto, o en edad adulta. Otras causas pueden ser infecciones, cambios hormonales, cambios articulares degenerativos, iatrogenia, problemas de oclusión…
En el caso concreto de la Disfunción Temporo Mandibular, el alcance del fenómeno es el de la región de la articulación entre la mandíbula y el cráneo (concretamente en el hueso temporal) y los músculos de la masticación y los tejidos anejos.
Esta Disfunción Temporo Mandibular afecta a un 6-12% de la población, en una proporción favorable a las mujeres 4:1 respecto a los hombres. A menudo tiene origen en el Bruxismo, el nombre técnico que denomina el hecho de pulsar los dientes o de hacerlos chirriar frotándolos entre sí, durante la vigilia y/o el sueño.
¿Cómo comprobar que nos encontramos ante un caso de la Disfunción Temporo Mandibular? Para saber identificarla sólo hace falta preguntarse:
¿Tengo ruidos articulares y/o dolor en la mandíbula cuando como o cuando abro y cierro la boca?
¿Tengo dificultades para abrir o cerrar la boca?
¿Tengo dolores de cabeza?
¿Tengo dolor en la boca de más de tres meses de evolución?
Si alguna de las respuestas es afirmativa, debería pensarse en hacerse una valoración por parte de un profesional competente. La complejidad de interrelaciones que se producen en esta localización, por otra parte tan importante para el buen funcionamiento del resto del cuerpo, hace que sea especialmente importante regular sus alteraciones y, antes, es necesario realizar un buen diagnóstico:
En el Dolor Oro Facial, será necesaria la valoración exhaustiva por parte de la Odontología que confirmará o descartará que sea un problema dental, articular, muscular, vascular… y propondrá su solución con la técnica más adecuada. En Cos lo haremos siguiendo los criterios de nuestra Odontología integrativa, preventiva y conservadora.
- La Osteopatía se encargará de estudiar funcionalmente las tensiones y movilidad de las diferentes partes de la región: cráneo-mandíbula, tensiones linguales, de raquis cervical y de la región del cinturón escapular y de primeras costillas, y las intentará resolver con su abanico de técnicas. Posiblemente se propongan ejercicios de autotratamiento, a fin de ampliar el efecto del trabajo osteopático. Otro posible abordaje de la Osteopatía puede ser el paliativo, sobre todo cuando la persona a tratar está utilizando alguna ortodoncia para corregir su equilibrio bucal o cuando ya existe un daño estructural irreparable. Hay que anotar que las ortodoncias, si bien necesarias en algunos casos, pueden producir diferentes niveles de tensión en la boca en particular pero también en el resto del cráneo y cervicales, por las ya citadas interrelaciones. En este caso, el objetivo será reducir este efecto secundario mientras dure el proceso.
- La Terapia Neural puede ser importante para resolver alteraciones del sistema nervioso que puedan ser el desencadenante del dolor y de la Disfunción. En este caso concreto, el tratamiento suele ser muy local, a diferencia de otras alteraciones en las que la Terapia Neural suele aplicarse a un área más extensa y no necesariamente cerca del síntoma. También se puede utilizar teniendo en cuenta su efecto miorrelajante.
- No se puede obviar el trabajo Psicoterapéutico para ayudar a la persona a corregir y/o regular sus niveles de ansiedad y estrés. Según el caso, se requerirá una intervención puntual o una más prolongada en el tiempo.
- Otras técnicas que pueden ser muy útiles y efectivas en el tratamiento del Dolor Oro Facial son la Medicina Tradicional China (sobre todo con la Acupuntura) o la Reflexología Podal.
La Medicina Integrativa es la mejor solución: determinar adecuadamente cuál es el motivo de la Disfunción Cráneo Mandibular de cada caso y saber las indicaciones de cada terapia es, aparte de la posterior coordinación de los diferentes profesionales de la salud que intervengan, la clave para seguir el mejor Plan Terapéutico y asegurarse el mejor resultado posible.
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