No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy, el embarazo no se recupera y nueve meses pasan volando

La vida nos da nueve meses de gestación. Y por algo ¡es! Es el tiempo necesario para que nuestras criaturas maduren para poder mamar, respirar y salir del cuerpo de la madre, de entre sus huesos. Es un tiempo justo que no sólo permite la maduración de la criatura, sino que permite también la maduración emocional de la mujer y de la pareja; el tiempo justo para hacer la metamorfosis hacia madre, hacia padre.

El estado de embarazo es un proceso normal en la vida y en el cuerpo de una mujer. Pero también es muy complejo. Y es tanto complejo que nos coge por sorpresa y apenas tenemos tiempo de ir descubriendo y paladeando todos los cambios que se van sucediendo día a día.
Para mí el embarazo es un momento de contemplación del cuerpo, de disfrutarlo, de explosionarlo. Tiempo de abrir una nueva mirada hacia una misma; tiempo de establecer un diálogo de pensamientos, sentimientos y tactos con la nueva persona que crece en la barriga. Tiempo para confiar en la fisiología y la potencia femenina, tiempo para apartar de la mente negatividades y miedos.

Tiempo, en fin, para reflexionar como madre, como padre, como pareja… y para sentirte en tu nuevo sitio.

Normalmente, como durante estos nueve meses continuamos con nuestra actividad habitual (¡y está bien que así sea!) no tenemos tiempo de disfrutar de todo lo que nos pasa. Los días pasan volando y por la noche quedan ratos rasguños en el sueño para comunicarnos. Solemos tener poca información de la normalidad, las hormonas, las emociones, los miedos buenos, el instinto, la logística, la sexualidad. Y es habitual sentirse sin referencias, ya que es complicado tener cerca a madres y padres criando y empatizar con ellos, conviviendo con ellos.

Y como hasta que no nos turbamos, no investigamos sobre el tema, durante estos nueve meses nos ponemos a buscar información, de esponjas mentales y recogiendo los pros y los  contras de la epidural, de la oxitocina, del corte del cordón, del masaje perineal… necesitamos que nos expliquen cómo hacer los ejercicios de Kegel, y saber si debemos cambiar en algo nuestra alimentación. Por no decir que nos empecemos a plantear temas como el amamantamiento, el cosechado, el chupete, las noches, las cunas de cosechado, las mochilas porta bebes, el biberón, las crisis de lactancia, la depresión post parte, la fiebre, las posiciones por el parto, la respiración, la vitamina K, la D… ¡Y es un no parar de mezclar temas! Y nos encontramos tomando decisiones sobre temas que tres meses atrás no sabías ni existían.

Durante mi práctica profesional me he encontrado madres que me explican que les pasaron cosas que no deseaban, que no tenían suficiente información y que el posparto es una montaña rusa para la mujer y su pareja, que a menudo se sienten desorientadas por el sentir de cada uno.

Pienso que éste es un tiempo en el que es muy importante la compañía y la información, encontrar grupos de apoyo y ayuda, no sólo en el posparto, sino durante el embarazo. Y durante la crianza, ¡claro!

Es por eso que le recomiendo enormemente participar en los grupos de acompañamiento al embarazo, el parto y la crianza; para tener un tiempo de dedicación exclusiva a su barriga, a su cuerpo, a todo aquello que el embarazo le mueve. Un tiempo para os informando de este proceso natural que está viviendo y de cómo puede habitarlo de manera más saludable. Un tiempo para plantearle opciones de parto y tomar las decisiones desde la calma, con certeza. Un tiempo, en fin, para sentirse acompañada.
Recomiendo grupos que le incluyan desde muy pronto, en el cuarto o quinto mes de gestación. Ya sé que en estos momentos todavía está trabajando y pensando que todavía falta mucho, ¡pero si la naturaleza nos da nueve meses de gestación es para aprovecharlos desde el minuto cero! De esta manera el proceso de interiorización y cambio es más completo y caminamos conjuntamente en lo físico y en lo emocional.

En Cos, desde las diferentes disciplinas con las que trabajamos, te ofrecemos un acompañamiento esmerado, amoroso y personalizado durante todo tu momento de embarazo, postparto y crianza. Porque sabemos que estos nueve meses son un tiempo muy valioso… y porque nueve meses, tú también lo sabes, ¡pasan volando!